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UC - Críticas

País: USA.

Año: 2013.

Duración: 140 min.

Género: Drama.

 

Dirección: Derek Cianfrance.

Guion: Derek Cianfrance, Ben Coccio y Darius Marder.

Producción: Lynette Howell, Sidney Kimmel, Alex Orlovsky y Jamie Patricof.

Música: Mike Patton.

Fotografía: Sean Bobbitt.

Montaje: Jim Helton y Ron Patane.

Diseño de producción: Inbal Weinberg.

Vestuario: Erin Benach.

Distribuidora: Tripictures.

 

Estreno en España: 6 Septiembre 2013.

Calificación por edades: No recomendada a menores de 16 años.

Interpretación: Ryan Gosling (Luke), Bradley Cooper (Avery Cross), Eva Mendes (Romina), Ray Liotta (Deluca), Rose Byrne (Jennifer), Bruce Greenwood (Bill), Ben Mendelsohn (Robin), Dane DeHaan (Jason).

 

HERENCIA DE DOLOR


“Cruce de Caminos" es un interesante y reflexivo drama, aunque le sobra algo de metraje, sobre la herencia de dolor ocasionada por los errores que dejan los padres a sus hijos y lo hace utilizando una peculiar narrativa que divide el film en tres partes diferenciadas y complementarias, pero que se aleja del manido formato de historias cruzadas tan utilizado últimamente y ofrece una nueva lectura del mismo. Como suele suceder en este tipo de obras con episodios independientes (por mucho que estén necesariamente interrelacionados para subsistir en un todo) existe cierta descompensación entre ellos, siendo en esta ocasión el primero de los episodios el mejor.




SINOPSIS: En “Cruce de caminos (The place beyond the pines)”, un misterioso y mítico piloto de motos, Luke (Ryan Gosling), sale del carnaval ambulante Globe of Death y recorre como un rayo los callejones de Schenectady (Nueva York) buscando desesperadamente a una antigua amante, Romina (Eva Mendes), que en secreto acaba de dar a luz a su hijo. En un intento de mantener a su nueva familia, Luke abandona su vida en el carnaval y comete una serie de atracos a bancos aprovechando su increíble habilidad con la moto. Todo se complica cuando en el camino de Luke se cruza un ambicioso oficial de policía, Avery Cross (Bradley Cooper), que busca ascender rápidamente en un departamento policial lleno de corrupción.



“Cruce de Caminos" es la nueva obra del director Derek Cianfrance, un cineasta de trayectoria más que atractiva que nos fascinó con su anterior y superior obra también protagonizada por Ryan Gosling "Blue Valentine". Ambas comparten una tonalidad dramática y amarga con un ligero rincón para la esperanza, y también comparten un ritmo pausado que penetra lentamente en el espectador a través de una cuidada atención hacia la psicología de sus personajes. En esta ocasión, más allá del cambiante punto de vista que dota a su historia en cada uno de los tres relatos, los derroteros que toman los acontecimientos no son excesivamente sorprendentes y el extenso metraje puede ocasionar cierta morosidad en los espectadores menos pacientes, sin llegar nunca a ocasionar aburrimiento.



"Cruce de Caminos" vuelve a apostar por un reparto con estrellas actuales. La primera parte (la mejor con diferencia) está protagonizada por un casi impasible Gosling (que por momentos parece retomar su personaje de "Drive") junto a Eva Mendes en un rol algo menor. Cuando el film alcanza su mayor intensidad es cuando la narración ocasiona la ruptura y nos traslada a la segunda parte protagonizada por otro mediático actor como es Bradley Cooper. Esta parte hace que el film pierda algo de fuelle, no porque la trama sea menos atractiva, pero algo hace que no cuaje igual de bien. La tercera parte es la clave de la historia y del porque Cianfrance nos la plantea, que si bien no consigue subir al nivel de la primera, sí que consigue que el público reflexione sobre como los errores y decisiones del presente pueden conllevar consecuencias en el futuro y no necesariamente a nosotros mismos.




UC (Daniel Farriol).

TRAILER